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La periostitis tibial o dolor en la espinilla es una lesión frecuente en aquellas personas que realizan actividades de larga distancia o incrementan el volumen de entrenamiento. Tanto las actividades deportivas como laborales que sobrecargan la musculatura y el tejido ósea de la pantorrilla favorecen la aparición de esta lesión. Por ello, es interesante conocer más sobre esta lesión para saber como evitarla y en el caso de presentarla como tratarla.
La periostitis tibial es la inflamación e irritación de la membrana que recubre el hueso por la parte externa denominada periostio. En esta membrana que recubre la tibia se insertan los músculos tibiales y cuando estos se sobrecargan producen una irritación del periostio provocando dolor agudo que empeora si se sigue con la actividad. Normalmente la periostitis se suele presentar en la parte anterior de la tibia, aunque en algunos casos también puede aparecer en la parte posterior dependiendo de la musculatura afectada.
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Para aliviar los síntomas sigue los siguientes consejos:
La periostitis tibial es una lesión que, aunque no sea grave, molesta y puede obligarte a parar la actividad. A veces suele mejorar con el reposo y el frío, pero es conveniente tratarlo mediante fisioterapia, ya que si no se recupera bien puede derivar en fisura o incluso en fractura por estrés. Para evitar llegar a este punto la fisioterapia mediante diferentes técnicas ayuda a bajar la inflamación del periostio y a relajar la musculatura implicada. También, puede aportar consejos y ejercicios para evitar futuras recidivas y llevar una vida de mejor calidad. Para ello, es conveniente consultar con fisioterapeutas expertos los cuales evaluaran cada caso en particular y determinaran el tratamiento a seguir: